Guía Dragon Age: Inquisition

Códice - Cartas y notas

Diario de Kolg

Una página arrancada de un diario:

“Kolg el ciego como la roca”, no paraban de repetir. Con sus dedos mugrientos empujaron mi rostro contra el suelo, me arañaron la oreja, me hicieron sangre. Dos pulgares convirtieron mi visión en dos puntos negros. Sus voces eran chillonas, muy chillonas. Pero pude oír su voz, la voz de la Roca. Cuando me abandonaron en el silencio de la oscuridad, ella se quedó. Su suave nana me habló de una manera en la que podía recuperarme: mi propia canción.

Lleno del amor de Madre, reuní la roca cantarina a mano. Decían que me envenenaría, pero Madre nunca haría eso, no a su hijo. En su melodía hay secretos que solo son para mí.

-----

Una página manchada de sangre de un diario:

Esta canción es suave, pero difícil de quebrar. Oigo las palabras, hasta puedo paladearlas, pero no puedo pronunciarlas. Quizá Madre necesita que me saque los dientes.

-----

Una página arrugada de un diario:

Madre me acuna mientras duermo; cálida, tan cálida. Su ritmo corre por mi garganta, quemando, hasta que los mineros y sus manos regordetas y crueles no son más que un recuerdo lejano. Kolg es un recuerdo, yo soy el hijo. Las palabras me llegan en oleadas. Me ahogaré en ellas. Por ella.

-----

La última entrada de un diario sucio en el que faltan varias páginas:

El canto de Madre brota fuera de mí. Fuego líquido chorrea de mis ojos, boca y oídos. Se lo doy todo y me convierto en un verso en su coro. Al fin estoy completo. Nunca me importaron mucho las palabras, solo la canción.