Guía Dark Souls III

Jefazos

Custodio de la tumba del Campeón y Gran lobo custodio

 

 

Custodio de la tumba del Campeón

 

-Lugar: Mundo Pintado de Ariandel (DLC Ashes of Ariandel).

 

Inicialmente estará el Custodio solo, que tiene la apariencia típica de cualquier espíritu invasor con forma humana y la forma de derrotarlo será básicamente la misma... centrar la vista en él y luego centrarte en esquivar y golpear cuando tengas oportunidad; olvídate de bloquear con el escudo, ya que algunos de sus ataques romperán la guardia. Ten en cuenta que al principio estará acompañado por varios lobos pequeños, los cuales deberán ser tu prioridad antes de empezar con el propio jefazo.

 

Gran lobo custodio

 

Cuando le hayas quitado más o menos la mitad de la vida, aparecerá otro lobo más, el Gran lobo custodio, y este será bastante más grande que el resto, además de más peligroso e igualmente (o más) ágil. Lo primero será rematar al Custodio Campeón, para luego ya poder centrarte con “tranquilidad” en el lobo.

 

Entonces, ten en cuenta los pilares que hay por la zona para estar a salvo de sus ataques, pero tampoco te relajes demasiado, por que el aliento congelante podrá dañarte igualmente por muy grande que sea el pilar que hay entre tú y él. No te precipites a la hora de atacar y vigila sobre todo cuando va a realizar el ataque con el que carga contra ti para evitarlo a tiempo esquivándolo hacia un lado.

 

Recompensa

 

60.000 almas

Huesos de adalid

Corazón valeroso