Guía Devil May Cry 4

Misión 7

 

 

Hay una misión secreta justo al comienzo de este nivel, que será imposible de completar por el momento. También hay una orbe roja de cristal cerca, debajo de un árbol. En la siguiente zona encontrarás a unos enemigos nuevos. Después de deshacerte de ellos, vete al Este y pasa por la puerta cerca de la fuente.

 

Ahora los enemigos de antes se transformarán en algo un poco más peligroso de lo que eran. No son gran cosa, lo único que ahora utilizarán unas espadas, cuando las saquen, espera a que se vuelvan a guardar para empezar a atacarlos. Aquí puedes romper las ventanas para coger orbes rojas cerca de la estatua inutilizada. Después de eso, sube por las escaleras y activa el interruptor para ir por el nuevo camino.

 

Vete por las plataformas rápidamente antes de que caigan. Ahora vete enganchándote con el brazo en los enganches hasta llegar al interruptor que tendrás que activar. Ahora tendrás que pasar por la plataformas de nuevo, pero aparecerán unos enemigos que te pueden tirar para abajo. Si esto sucede tendrás que enfrentarte a unos enemigos para poder continuar. A los enemigos de la plataforma (no a los de abajo) mejor que no intentes matarlos y te centres en esquivar sus ataques y cruzar la plataforma.

 

Cuando llegues al río, verás varias vainas de semillas que podrás romper para conseguir orbes rojas. También puedes encontrar la misión secreta 5. Después de eso vete al Noroeste para llegar a la plaza en la que tendrás una pelea; al acabar vete por la salida de arriba, activa la Gyro Blade para destrozar la barrera y continuar.

 

En la siguiente zona te atacará una serpiente. Tendrás que escapar de ella por las plataformas. Después de pasar por la puerta verás una estatua en la que necesitarás tener tu medidor de estilo en nivel A para poder destruirla y conseguir un fragmento de orbe azul. Pasa por los enemigos hasta encontrar otra estatua demoníaca. Destroza los objetos cercanos para restaurarte la vida si lo necesitas ya que ahora viene un Boss.

 

Boss: Echidna

 

En la primera fase mientras evitas sus diversos ataques, atácala en el aire, en la cabeza. En ciertos momentos bajará al suelo y entonces aprovecha para lanzarle un ataque fuerte y hacerle así más daño que cuando está en el aire.

 

En la segunda fase, cambiará de forma y también sus ataques, en los que te lanzará semillas desde su cuerpo. Meterá su cuerpo entero en el suelo y afuera dejará sólo los pétalos y su forma “humana”. Así es más fácil atacarla, pero también usará unos tentáculos para atacarte y éstos son algo difíciles de esquivar.