Guía Kingdom Come: Deliverance
Persuasión
A veces necesitas poder de persuasión para lograr tus objetivos. Cuando hablas con la gente, normalmente puedes seleccionar el tipo de impresión que quieres causar.
También puedes usar sencillamente el diálogo, pero se ve influenciado por la reputación que tengas en el momento de hablar con esa persona.
En la Edad Media, la posición social era crucial, de forma que tu atuendo y tu aseo, además de tu reputación, pueden suponer una gran diferencia a la forma en la que la gente te responde.
Si tienes un aspecto peligroso, la gente temerá enfrentarse a ti y es más probable que te asignen misiones arriesgadas. Todo ello depende de tu fuerza y del efecto disuasorio de tus armas y equipo, pero también influyen otras cosas, como las manchas de sangre en tu ropa.
A veces puedes confiar en que el dinero hable por ti. Solo tienes que acordar una suma persuasiva. Sobornar funciona igual que comprar (ver Comerciar o Regatear).
En casos especiales, puedes probar cualquier otra habilidad de Henry, como su equitación.
No solo importa la forma de persuadir, sino también la oferta en concreto, ya que a veces no basta solo decidir en función de tus mejores características. ¡Tienes que leer lo que Henry va a decir!.
Pero a cada persona hay que tratarla de forma distinta. No intimidarás a un matón con facilidad, y te vistas como te vistas, no será fácil que impresiones a los nobles. Por eso, las habilidades de Henry no tienen un valor universal asignado sin más, sino que se comparan con las habilidades de su homólogo. En el juego, bajo los correspondientes iconos, puedes ver los valores de las distintas habilidades. Siempre puedes ver tus propias habilidades. Las habilidades de tu homólogo son visibles para ti si es alguien a quien conoces bien o si se te da bien escudriñar a las personas (se aprende en la ventaja “Empatía”).
Pero no es solo una cuestión de evaluar los atributos; el resultado depende enormemente de otros factores. Tu reputación con tu homólogo, sí estás sucio o sangrando... todo eso es importante. Pero también significa que, si no puedes resistirte a la ladina lengua de un comerciante, por ejemplo, quizá quieras antes envenenarlo un poco y así será más fácil de persuadir. O si alejas al guardia de sus amigos, será más fácil de asustar.