Guía The Legend of Zelda: Spirit Tracks

Templo de las Arenas

 

 

Este primer piso está lleno de rocas rodantes y de .... ¡Si! ¡Arena!. Pues bien, desde la entrada vete a la derecha hasta el pasillo con rocas rodantes. Las podrás esquivar fácilmente pasando por los huecos entre ellas; eso si, no te metas en el hueco de la izquierda en la pared pensando que podrás descansar allí, por que es un suelo-trampa.

 

Al llegar a la parte de arriba de este pasillo, gira a la izquierda y te encontrarás con una puerta cerrada. Pero al lado, justo en al borde del agujero, verás 3 azulejos azules. Ponte en el del centro y apunta al Norte para disparar en el momento exacto de manera que la flecha pase por entre las rocas rodantes del otro lado y golpee al Ojo. Con esto bajarás el portón azul de la izquierda.

 

Pasa por la puerta y abre el cofre para conseguir una gran recompensa..... una rupia verde. Pero al hacerlo aparecerá una emboscada de esqueletos, así que elimínalo a todos con el látigo. Entonces aparecerá un cofre, esta vez con algo útil, como una llave pequeña. Ahora vuelve a la zona central por donde entraste y en la esquina Noreste verás una puerta en donde tienes que usar la llave recién conseguida para abrirla y poder ir por las escaleras al siguiente piso.

 

Cruza el puente con pinchos a los lados y tírate a la arena de debajo por la parte derecha. Te encontrarás con un tipo de enemigos de arena, a los cuales no podrás derrotar con las armas que tienes en estos momentos, así que simplemente esquívalos. Vete hacia abajo y a la derecha. Al fondo del pasillo verás una estatua que te dirá la localización de los tesoros, pero como siempre, te recuerdo que sería una pérdida de rupias, por que Eliteguias te lo dice gratis.

 

En la habitación del Norte hay varias trampas rotatorias con pinchos. Tendrás que pasar con cuidado entre ellas para llegar a las escaleras del norte e ir al siguiente piso.

 

Nada más entrar, verás unas tinajas a la derecha, pero mejor que las dejes para después por que al entrar en la siguiente habitación te espera una emboscada de esqueletos armados. Esta vez el látigo no será tu mejor aliado aquí, así que utiliza las bombas o el arco para acabar con ellos. Procura mantenerte alejados de ellos por que sus ataques te pueden hacer bastante daño.

 

Cuando los hayas matado, pasa por la puerta de abajo a la izquierda. Sube las escaleras y abre el cofre para conseguir un nuevo juguetito, el Báculo de las Arenas. Este báculo sirve para levantar la arena allí por donde pases su luz verde. Lo cual sirve para elevarte a ti mismo a zonas superiores o para crear un camino para que pase Zelda cuando posee a un espectro, suponiendo que esté al mismo nivel que los cubos de arena que se forman. También servirá para combatir a los enemigos de arena que viste hace un rato, los sacarás de la arena dejándolos aturdidos y podrás atacarlos normalmente. Su forma de utilización es muy fácil, tan sólo tienes que presionar con el lápiz la pantalla y sin soltarlo dibujar una línea por donde quieres que se eleve la arena.

 

Regresa a la zona en donde luchaste con los esqueletos y verás que la puerta está cerrada, así que ya sabes, utiliza el Báculo para elevarte por la zona de la izquierda y así poder llegar a las escaleras e ir al piso anterior.

 

Ve a la habitación de las trampas rodadoras con pinchos. Esta vez rodarán las tres juntas, sin dejar ningún hueco por el que pasar, pero ahora cuentas con el báculo, así que levanta un bloque de arena delante de una de las trampas y ésta se parará. Tu objetivo es llegar a la parte Sur, pero antes deberías pararte para coger los cofres de los lados.

 

Empieza por subirte a la plataforma de la izquierda utilizando el báculo, dentro de ese cofre hay una rupia roja. No te bajes de aquí por que al otro lado no podrás acceder directamente sólo con tu vara. Tendrás que hacer que las tres trampas se paren juntas para así poder cruzar por ellas hasta el otro lado en donde encontrarás un cofre con un Tesoro dentro.

 

Vete a la habitación del Suroeste y la puerta se cerrará detrás de ti. Ahora ya podrás eliminar a esos monstruos de la arena. Atízales con el báculo a uno hasta que se quede como congelado y entonces podrás o bien golpearle con la espada o bien cogerlo y lanzarlo hasta destrozarlo. Cuando los hayas derrotado, se abrirán las puertas. Vete al Norte y primero elévate a ti mismo para subir a la parte Norte y después paraliza la trampa rodante para poder cruzar por ella y pasar por esas escaleras.

 

Ahora que tienes el báculo, ya podrás acceder a varios de los tesoros de este piso. Ve a la zona central y elévate a ti mismo para subirte a la plataforma de arena del Norte a la izquierda de las escaleras. En esta plataforma, vuélvete a elevar para llegar al cofre de arriba que contiene un Tesoro.

 

Ahora vete a la parte Suroeste y verás dos grandes cilindros, uno a nivel del suelo y otro en una plataforma elevada. Podrás moverlos elevando la arena por uno de sus lados, entonces rodarán hacia el otro. Pues tíralos por los agujeros de la izquierda. Ahora súbete a la zona elevada del principio y si cruzas el agujero utilizando el látigo en las agarraderas, verás una piedra espiritual reveladora de tesoros, así que ahórrate el viaje.

 

Vete a la derecha y hacia el trozo de arena del Noroeste, bajando por unas escaleras y pasando por un portón azul. En esta zona verás tres ojos al otro lado del agujero. Están temporizados, así que tendrás que activarlos muy rápido. Elévate a ti mismo sobre la arena, cambia rápidamente al arco y dispara a los dos ojos que están más arriba, entonces bájate de la arena elevada y dispara al de abajo. Cuando estén los 3 activados correctamente, bajarás el portón azul.

 

En este nuevo pasillo hay un cilindro bloqueando el paso; pues avanza un poco y ponte en el hueco de la derecha, entonces con el báculo, ve empujando el cilindro desde el Norte hacia el Sur de manera que puedas pasar tu al Norte. Ve hasta el fondo al Norte y elévate para subir por la izquierda.

 

Desde esta zona elevada, arrastra al cinlindro hacia el Norte, de manera que puedas cruzar por él (notarás que la vista cambia ligeramente, pudiendo visualizar todo mejor). En el otro lado, empuja el cilindro hacia la plataforma de al lado para volver a cruzar a la izquierda. Entra en la pequeña habitación y mata a los dos enemigos de arena para hacer aparecer un cofre en la parte Noreste de esta zona.

 

Pero antes de ir a por él, mira en la zona arenosa del Norte de esta habitación. Hay un panel en la pared pero una pequeña valla te impide el paso, así que tendrás que elevarte estando en el pequeño trozo de arena de tu lado para poder acceder a él. En el cartel verás el siguiente mensaje "Entre el uno y el tres... llave ... descansa... Mmm... Llave... descansa...". Ve a coger el cofre de antes para conseguir una rupia roja.

 

Ahora sal de aquí y vete al pasillo con las rocas rodantes del Este. Esta vez las rocas vendrán rodando a pares, con lo cual no podrás avanzar por este pasillo como antes. Ve al pequeño trozo de arena del principio a la derecha y elévate allípara subirte a esa zona elevada pegada a la pared de la derecha. Vete hasta el Norte y espera en la esquina para saltar justo cuando pase un grupo de rocas, entonces corre hasta el siguiente pasillo de la izquierda.

 

Tendrás que activar el Ojo que verás al otro lado del agujero, como habías echo anteriormente, sólo que ahora las rocas estarán paradas y tendrás que apartarlas con la vara. Hazlo y después dispara una flecha al Ojo para bajar el portón azul de la izquierda.

 

Al entrar en la siguiente habitación, se cerrará la puerta y te encontrarás con un enemigo conocido, pero esta vez será diferente al estar en la arena, ya que la utilizará para esconderse de tus ataques. Mientras están escondidos tienes que elevar la arena en la zona en donde estén, así los harás salir y quedarán aturdidos, aunque en una zona superior, por lo que rápidamente tendrás que elevarte a ti mismo para golpearlos con la espada.

 

Al derrotarlos harás aparecer un cofre en la zona Noroeste, así que elévate para llegar a él y conseguir una rupia roja. Al Sur de este cofre verás un pasillo lleno de arena. Pues eleva la zona con el Báculo hasta hacer aparecer una llave pequeña.

 

Ahora vuelve a la zona central del inicio en donde hay una zona de arena, una roca, una pared rompible... un interruptor junto a un mecanismo... Tendrás que empujar la roca para colocarla encima del mecanismo, entonces golpea el interruptor y lanzarás la roca contra la pared rompible. Ve por esas escaleras.

 

En este piso verás que hay arenas movedizas en ciertos lugares en lugar de las arenas normales, pero con el báculo podrás formar bloques de arena y cruzar por ella. Pues hazlo en las arenas movedizas de la izquierda y abre la puerta cerrada. Verás que a parte de los enemigos de arena hay dos interruptores en el suelo y ambos tienen que estar pulsados para abrir el portón azul de la derecha. Pues no tienes más que petrificar con el báculo a los dos enemigos y entonces cogerlos y depositarlos encima de los interruptores.

 

Estarás frente a una gran zona repleta de arenas movedizas. Como ya sabes, puedes solidificarla con el báculo, pero a parte de las arenas movedizas, también habrá otras amenazas por la zona. Pues bien, primero ve a la izquierda creando un camino a medida que vas avanzando y al fondo habrá unos dardos disparándose continuamente. Antes de cruzar la esquina, rápidamente crea un camino desde esa posición y cruza esquivando los dardos con tu escudo (con mirar hacia ellos ya llega). Al fondo encontrarás una Insignia.

 

Ahora tendrás que ir a la zona de la derecha. Habrá más dardos y justo a la derecha, una pequeña zona segura, así que desde la zona a la que accedes al rio, traza un camino hasta esa zona segura y cruza hasta ella equivando los dardos. En esta siguiente porción vete haciendo el camino a medida que avanzas y vas esquivando a los dardos. Esta vez no tendrás que trazar un gran camino con antelación como en la zona de la izquierda, por que ahora tendrás que recorrer muy poco para pasar por ellos.

 

Sube las pequeñas escaleras en la zona segura y tendrás que resolver un nuevo puzzle. Hay un bloque grande con una punta en su zona superior y el agujero del suelo tiene un hueco... lo pillas ¿no?. Para ello mueve el bloque grande usando el báculo en el siguiente orden: abajo, derecha, abajo, derecha, arriba, izquierda. La punta del bloque grande encajará perfectamente en el agujero del suelo y se abrirá el portón azul del Sur.

 

En esta siguiente habitación a la izquierda hay rocas rodantes, pues tendrás que parar una con el báculo y llevarla hasta la catapulta de la derecha al lado del interruptor. Con la roca puesta en su lugar, ponte encima del interruptor del Suelo en la parte de abajo y se extenderá un puente. Ahora activa el interruptor (con el bumerán por ejemplo) para lanzar la roca contra la pared rompible.

 

Todavía no podrás cruzar por el puente por que se esconderá de nuevo si dejas de pulsar el interruptor del suelo. Así que tendrás que parar otra roca más y llevarla hasta dicho interruptor. Entonces ya podrás cruzar el puente. Pasa por al lado de la estatua de piedra y entra en la gran habitación de la izquierda para resolver otro puzzle más. Pero antes de empezarlo, pulsa el interruptor del suelo para abrir la puerta de la izquierda para así tener un atajo para ir al piso anterior. Ahora en esta zona cruza las arenas movedizas por el Noreste y ve a ese trozo de suelo firme para abrir un cofre y consegur una rupia roja.

 

La solución de este puzzle, al menos lo que tienes que hacer, parece evidente, rellenar los azulejos del suelo con la figura correspondiente de los bloques. Pero a parte de cómo tienes que girarlos, sólo hay dos bloques ¿qué color activas primero? El color de la puerta del Suroeste te dará una pista de ello. Pues bien, mueve los bloques en el siguiente orden descrito más abajo.

 

Ponte dentro de la arena para que la vista cambie y te sea más fácil; ten en cuenta que si te equivocas, no tienes más que volverlo a mover en la dirección opuesta a la que lo hiciste, pero si te liaste y no sabes que hacer, tan sólo tienes que ir por las escaleras de la izquierda y volver inmediatamente, los bloques volverán a su posición original.

 

-Bloque izquierdo: derecha, derecha, abajo, izquierda, abajo

-Bloque derecho: izquierda, izquierda, abajo, derecha, abajo, izquierda, arriba, izquierda

-Bloque izquierdo: derecha, derecha

 

Ahora pasa por la zona azul y avanza por el pasillo resguardándote y esperando en la zona segura a que pase la trampa rodante. Llegarás a una habitación con esqueletos armados, así que derrótalos con flechas y aparecerá un cofre con un Tesoro.

 

En la parte Norte hay dos trampas rodando sobre una zona de arena. Tienes que parar primero la de arriba a un lado, entonces la de abajo párala justo en el centro y elévate para subirte a ella por la parte Norte de la misma y poder acceder así a la plataforma del centro. Pulsa el interruptor y abrirás el portón del Norte. Ahora bájate de ahí y haz lo mismo pero al revés ¿eh? Para la trampa de abajo a un lado y después para la de arriba justo en el centro y elévate para subirte a ella.

 

Al entrar en esta habitación, se cerrará la puerta y tendrás que enfrentarte a los gusanos escupe bolas subterráneos, enfréntate a ellos de la misma forma que en el anterior encuentro. Al matarlos podrás ir a la habitación del Norte. Estará aparentemente vacía, pero si elevas el suelo con el Báculo, en la parte izquierda habrá una rupia roja, una azul y una verde grande; en la parte de la derecha está la Llave del Boss.

 

Tienes que llevarla hasta la puerta del Boss, pero el camino no será fácil. En las primeras trampas rodantes, lanza la llave abajo, para las trampas a un lado, baja para coger la llave y lánzala rápido hacia el Sur para poder volver a parar a las trampas y que no te aplasten. En la siguiente trampa rodante, vete lo más rápido que puedas a la zona segura, espera a que pase y corre hacia la salida.

 

Deposita la llave al otro lado de las arenas movedizas junto a la puerta y tendrás que resolver la segunda parte de este puzzle encajando las piezas rojas para así bajar el portón que da a la puerta del Boss. Ahora ten cuidado con ir por las escaleras para resetear los bloques por que si lo haces, la llave volverá a su posición de origen y tendrás que volver a por ella y con ella a través de las trampas. Mueve los bloques en el siguiente orden:

 

-Bloque derecho: abajo, derecha, arriba, izquierda, izquierda, izquierda

-Bloque izquierdo: derecha, derecha, derecha, abajo, izquierda, arriba

 

Ahora cruza tu las arenas y lanza la llave a la puerta para abrirla. En la antesala del Boss, elévate para romper las tinajas y para subir a la zona Norte. Examina la losa para hacer aparecer el tele-transportador y después ve por la puerta para enfrentarte al Boss.

 

Boss: Cálaver, demonio ancestral

 

Avanza un poco y verás la escena introductoria de este nuevo Boss. Verás aparecer una cabeza esquelética y luego se mostrará su columna vertebral. Tendrás que destruir cada una de las partes de la columna para que la cabeza quede a nivel del suelo. La columna sólo puede ser destruida lanzándole una piedra desde una de las cuatro catapultas que rodean a Cálaver.

 

Cada cierto tiempo, Cálaver lanzará una roca de su base. Cuando lo haga, ten un muro de arena listo para parar la roca y luego dirígela hacia una catapulta. Entonces pulsa el interruptor de dicha catapulta y se lanzará la roca, destrozando así una parte de su vértebra.

 

Tendrás que repetir esto otra vez, pero ahora Cálaver lanzará varias rocas. Simplemente para una y la segunda roca la destruirá, dejando así la tercera roca parada y lista para posicionar en la catapulta. Dispárasela a Cálaver para destrozarle otra vértebra. Ahora ten cuidado con un nuevo ataque, un láser rojo. Cuando lo vaya a lanzar, su cabeza brillará, entonces empieza a correr hacia un lado para esquivarlo. Este láser lo podrá disparar durante toda esta segunda fase, no sólo después de destrozarle la segunda vértebra.

 

Ahora tendrás que dispararle una roca pero de manera diferente, por que la vértebra que tienes que destruir está a un lado. Pues bien, para una roca (recuerda lo mencionado en el segundo párrafo sobre las tres rocas que lanza), colócala en la catapulta y haz que Cálaverte te siga con la mirada de manera que la parte de la vértebra quede mirando hacia la catapulta. Entonces saga el bumeráng y golpea el interruptor para lanzar la roca.

 

Aún quedan dos vértebras más, pero ahora el Boss lanzará unas rocas más fuertes que las anteriores y necesitarán paredes más largas para pararse, pero por el resto, la mecánica es la misma que antes, siguiendo la estrategia del párrafo anterior, golpeando el interruptor de lado cuando su catapulta apunte al lado en el que está la vértebra, que casualmente ahora está en su parte trasera por lo que las "maniobras de distracción" serán más complicadas.

 

Cuando la cabeza quede a nivel del suelo, forma una pared de arena alrededor del Boss para paralizarlo momentaneamente. Elévate a ti mismo y ve a atacarle al cristal rojo para asestarle tantos espadazos como puedas. Pero todo esto hazlo muy deprisa, por que a parte de que la arena se deshace ella sola, el boss también la comerá. Repite este último procedimiento hasta que esté muerto.

 

Cuando esto suceda, coge el Contenedor de corazón del cofre y baja por las escaleras.

 

El Arco y las Flechas de la Luz

 

Rompe las tinajas y sube las escaleras para abrir el cofre y conseguir el Arco y las Flechas de la Luz. Como el propio juego te indica, para lanzar una flecha de luz, tienes que presionar con el lápiz y mantenerlo un tiempo antes de soltarlo. Con esto activarás ciertos interruptores y acabarás con los enemigos más poderosos.

 

Equípate con el Arco y dispara una flecha cargada al Ojo del Norte al otro lado del agujero. Cruza el puente que se formará para regresar a la zona del tren. Móntate en él y verás una escena. Cuando acabe, conseguirás la Espada Trenebunda, con la que no necesitarás conseguir las lágrimas en la torre de los dioses para cargar la espada y ocupar a un espectro... ya podrás hacerlo directamente.

 

NOTA IMPORTANTE: A partir de ahora ya puedes completar todas las búsquedas secundarias, conseguir todos los contenedores de corazón, fortianitas, conejos, insignias y demás cosas. Así que ponte a ello antes de tu última visita a la Torre de los Dioses.