Guía Dragon Age: Inquisition

Códice - Grupos

Los acorazados qunari

¿Os pensáis que es difícil combatir a los qunari sobre tierra? Eso es que nunca habéis tenido que enfrentaros a ellos en aguas abiertas. Sin viento, con las velas caídas, pero esos gigantes malnacidos no dejan de acercarse. Siempre nos habíamos reído de los qunari por su estúpido servilismo, pero fuimos testigos de su disciplina mientras se acercaban sin parar, con los remos en formación perfecta incluso cuando los esclavos de nuestras galeras flojearon y decayeron.

Se pusieron a nuestro costado, con su gran barco que era el doble de grande que el nuestro, y desenfundamos los aceros, listos para que nos abordaran. En vez de ello, una serie de detonaciones agitó las olas, escupiendo humo por doquier. Las Bolas de hierro del tamaño de la cabeza de un hombre volaban como si las hubieran disparado con un arco. Atravesaron casco, mástiles y marineros por igual y nuestra nave se deshizo en pedazos como el juguete de un niño. Yo habría muerto en las aguas de no haber venido un barco mercante a investigar los restos.

Aquel día comprendí que, aunque el imperio quizá ganara la guerra a los qunari por tierra, nunca los derrotaría en el mar. También fue el día en que decidí probar a ganarme la vida como guarda de mercaderes.

--Un extracto de Exiliados del Imperio, de Gregorias Pepigit