Guía Dragon Age: Inquisition

Códice - Cuentos e historias

Duro en Altaciudad: capítulo catorce

 

 

Duro en Altaciudad: capítulo catorce

 

Por Varric Tethras

 

El mayordomo del difunto magistrado Dunwald pestañeó cuando Donnen Brennokovic irrumpió en el vestíbulo.

 

“Que venga lady Marielle. Ya”. Salió directo hacia el salón donde se exponía la colección del magistrado.

 

Envuelta en un chal negro, Marielle llegó a la habitación y se apoyó en una de las vitrinas. “¡Guardia! Qué sorpresa más agradable”.

 

“¿Dónde está Jevlan?”

 

Su sonrisa flaqueó. “¿Por qué lo iba a saber? Es tu compañero”.

 

Donnen alzó la nota. “Es tu perfume, lady Marielle.” La soltó en la vitrina que estaba a su lado. “¿Qué hacías en el cuartel de la guardia?”

 

“La nota no la dejé yo”, dijo con una tranquilidad deliberada. “Y no tengo a tu compañero”.

 

“Pero sí estuviste en el cuartel”. Él se alejó para examinar una vitrina. “Me dijiste que Wagner quería comprar toda la colección del magistrado, pero él me dijo que solo le interesaba una espada”. Abrió el estuche “Y creo que nunca estuvo en la colección de Seamus. Creo que era la espada que tenía que estar aquí”. Señaló la caja vacía forrada de terciopelo. “Miré en los archivos del vizconde y solo llevabas tres semanas casada con el magistrado Dunwald. Dime para quién trabajas y dónde está mi compañero, y veré si puedo conseguir que llegues a un acuerdo con el vizconde”.

 

“La Capilla”. Marielle cerró la puerta con cuidado. “Me mandaron a Kirkwall hace unos meses cuando empezaron a correr rumores sobre la espada”. Examinó la nota. “A Jevlan no lo tengo yo. Esto ya estaba en su catre cuando fui a buscaros”.

 

Donnen no ocultó su escepticismo. “Eres inocente, pero no le dijiste a ningún guardia que faltaba”.

 

“Alguien lo sacó del cuartel, serah, y nadie sabía nada. ¿No te parece raro?” Lo miró a los ojos. “¿Has oído hablar de los ejecutores?”

 

“Son una leyenda”.

 

“Una leyenda que mata”. Ella suspiró. “Los ejecutores tienen a tu compañero y creo que tienen a alguien infiltrado en la guardia de la ciudad. ¿Cómo sino habrían sacado a Jevlan de la fortaleza sin que los vieran?”

 

Donnen la vio jugueteando con el chal. “¿Qué hacías en el cuartel?”

 

“Sospechaba que los ejecutores tenían a un topo”. Se encogió de hombros. “¿Cómo si no habrían conseguido que el pobre conde de Favre le abriera la puerta a su asesino? Como acordó la compra de la espada en nombre de Seamus, se había escondido en su casa. Únicamente os había visto a Seamus y a ti”.

 

Localización:

-Forma parte del DLC Intruso.

Recoge el libro en el Palacio de Invierno junto a una pequeña fuente junto a una de las Chuches caras para perros.