Guía Final Fantasy XVI

La maldición de los cristales

 

 

Cid revela a Clive y a Jill la verdadera naturaleza de los Cristales Madre, origen de la corrupción que anida en la tierra y el corazón de los hombres. En su afán por construir un mundo en el que todos puedan vivir en liberad, los tres ponen rumbo a la capital sacra de Oriflamme para destruir el primero de tantos yugos que esclavizan al ser humano.

 

Se activa después de completar Un mundo injusto.

 

La maldición de los cristales La maldición de los cristales

 

Avanza junto con Jill y Cid por el interior de la zona hasta llegar al comedor, en dond eos están esperando varios enemigos imperiales.

 

Artillero imperial

 

En la siguiente sala más de lo mismo, con la diferencia de que aquí cuando los elimines, aparecerá el jefazo Artillero imperial, un gordito equipado con un enorme cañón.

 

Lo que más problemas puede darte es cuando usa el cañón a modo de lanzallamas y va hacia ti... si tienes la vista centrada en él quítala y aléjate corriendo todo lo rápido que puedas, estando atento para esquivar si fuera necesario.

 

Cuando le hayas vaciado toda su barra de salud, verás una escena en la que se recupera por completo y además ser hará más fuerte.

 

Algunos de sus ataques se verán potenciados, como cuando clava su cañón en el suelo y causa explosiones en las zonas que estarán marcadas instantes antes, habiendo más de esas explosiones que en la primera fase.

 

Luego, tanto cuando se desliza de un lado a otro de la sala intentando chocar contra ti como cuando da un salto y lo que intenta es aplastarte, ambos se evitan simplemente esquivando en el último momento.

 

La maldición de los cristales La maldición de los cristales

 

Tras derrotarlo (y recibir el accesorio "Merced de las llamas (Ignición)" como recompensa, entre otras cosas), móntate en el elevador que tienes justo delante para bajar en él y continúa avanzando por las minas, mientras te vas enfrentando a algunos enemigos. Presta atención al aviso en pantalla sobre el "Grito de guerra" de los enemigos, por el cual aumentarán su ataque y por lo tanto deberían ser tu prioridad.

 

La maldición de los cristales

 

Más adelante, cuando tienes que pasar por una rejilla metálica, asegúrate de abrir el cofre cercano para conseguir la "Espada coralina".

 

La maldición de los cristales

 

Al salir de los túneles de la mina, avanza por la Galería de Grégora mientras te vas abriendo paso entre grupos de Espíritus, incluido un Lich entre ellos.

 

Dragón akásico

 

No tardarás mucho en encontrarte con el Dragón akásico, el segundo jefazo.

 

Por norma general mantente siempre pegado a él y atácale a las patas, es donde menos peligro correrás.

 

Ten cuidado cuando lance un rayo láser, por que luego, el rastro quedejará en el suelo explotará, así que asegúrate de separarte lo suficiente para que no te alcance.

 

Cuando le has quitado la suficiente salud, el ataque más peligroso que tiene es cuando se pone a volar y va hacia ti en zigzag expulsando un peligroso aliento de fuego... tienes que correr en línea recta hacia él fijándote muy bien en sus movimientos de manque que coincida que al pasar junto a él lo hagas por el lado opuesto a por donde suelta el aliento.... simplemente esquivarlo va a ser complicado.

 

Más adelante lanzará proyectiles de fuego, seguido de láser (que luego explotan) y terminando con una embestida contra ti desde el aire, la cual tendrás que esquivar justo en el último momento.

 

La maldición de los cristales

 

Cuando logres derrotarlo, tienes que pasar por la puerta del fondo del escenario del combate para entrar en la zona del Santuario. Entonces, simplemente sube las escaleras hasta arriba del todo.

 

Tifeo

 

Tras unas escenas, comenzará el combate contra el jefazo Tifeo, aunque inicialmente tendrás que enfrentarte a enemigos normales, que irán llegando en varias oleadas. Además, al poco rato también tendrás que tener cuidado con el suelo para evitar recibir daño (primero con los círculos luego con los láser en línea recta... pero ambos bastante obvios).

 

Al comenzar la segunda fase (con un QTE para esquivarlo), estarás enfrentándote a él pero ahora manejando a Ifrit, así que presta atención a los controles en pantalla. Lo único a destacar es cuando crea una enorme área de efecto en el suelo, teniendo uqe salir rápidamente de ahí con "Embestida escarlata" (manteniendo presionado Círculo mientras te mueves hacia uno de los lados).

 

Tifeo

 

Tras hacerle suficiente daño pasaremos a la siguiente fase, que será básicamente lo mismo pero un poco más "hipervitaminado"... al menos en su mayor parte, por que tiene un nuevo ataque por el que mandará contra ti enormes paredes oscuras con una pequeña apertura, teniéndote que situar en ésta para no recibir daño y estando la dificultad en que tendrás que desplazarte muy rápido para llegar a colocarte a tiempo (así que ya sabes, usa la embestida con Círculo para ello).

 

Cuando le quede poca salud, tendrás que rematarlo con una serie de QTE (esquivar con R1, pulsar repetidamente Cuadrado, esquivar con R1 y pulsar repetidamente Cuadrado).

 

Cuando logres derrotarlo recibirás el trofeo Desacato, completándose así esta misión y comenzando la siguiente, Cid el Infame.