Guía Elden Ring
Cueva del desolado
La entrada está en el punto indicado del Campo sacroníveo, por el extremo Este del río congelado, aunque está bloqueada por una niebla y para disiparla necesitas 2 Llaves de espada pétrea.
En la primera sala nada más entrar tienes el lugar de gracia Cueva del Desolado y un cadáver con Runa dorada [7] x1.
Un poco más adelante, en la zona amplia, verás un cadáver con Grasa congelante x4 y un Bastardo descansando. De los dos caminos disponibles, ve primero por el de la izquierda y aparte de un par de ratas y más bastardos, encontrarás otro cadáver con Grasa congelante x1.
Da media vuelta y ahora ve por el otro camino. Por la parte izquierda, aparte de dos bastardos durmiendo, verás un cadáver con Mariposa naciente x1, mientras que por la derecha tienes otro con Runa dorada [10] x1.
En esta sala primero sube por los bordillos de la derecha y desde allí coge carrerilla para saltar a la parte central, en donde hay un cadáver con Runa de héroe [2] x1.
Avanza por el siguiente pasillo, en el que hay un bastardo durmiendo, y al llegar a la sala amplia, aparte de más bastardos (uno de ellos volador), encontrarás dos cadáveres con Arco rúnico x1 y Flecha de llamas espirituales x10.
Regresa a la sala anterior y, según vienes ahora, gira a la derecha y salta por las rocas centrales para ir por el pasillo que te indicamos en Eliteguias con las imágenes de arriba.
Déjate caer poco a poco por los bordillos y una vez abajo, ve abriéndote paso entre varias medusas. Con la sala despejada, examina los cadáveres que contienen Bolos desheladores x2, Lirio de Miquella x3 y Dardo de cristal x8, luego toma la única salida disponible para encontrarte un par de medusas más, un cadáver con Bolos desheladores x3 y un agujero por el que tienes que tirarte.
Pero no te dejes caer de golpe, ve haciéndolo poco a poco por las plataformas, además en una de ellas hay un cadáver con Grasa congelante x6. Y una vez abajo, ya podrás pasar por la niebla que da al jefazo Paladín bastardo. Cuando lo derrotes, sal de allí usando la “llama”.