Guía Elden Ring
Catacumbas de los Picos de los gigantes
Ve al punto indicado desde el gran puente de piedra en Picos de los gigantes para acceder a esta mazmorra.
Al girar la esquina en el pasillo inicial ya verás el lugar de gracia Catacumbas de los Picos de los gigantes, así que asegúrate de descansar en él.
En la intersección primero ve todo recto y aparte de los diablillos (cuidado con los que están escondidos al acecho), recoge la Convalaria sepulcral [7]. Luego da media vuelta y sigue hasta el elevador (habrá más diablillos escondidos), en el que tienes que montarte para bajar en él.
Una vez abajo, activa de nuevo el elevador para que éste vuelva a subir, pero tú quédate en tierra firme y pronto verás aparecer otra plataforma en la parte inferior de dicho elevador, así que móntate ahí para bajar a la parte inferior de las catacumbas.
Aquí abajo te vas a encontrar con un Perro guardián funerario del Árbol Áureo que aparecerá como enemigo normal. En este pasillo cuidado con la estatua, la cual no escupirá fuego sino una neblina que te congelará, así que como siempre, en Eliteguias te recomendamos que le dispares desde lejos con un arco.
En la sala de la izquierda, aparte de un interruptor trampa en el suelo, te esperan 2 diablillos escondidos y una Convalaria sepulcral [8].
Al final del pasillo te espera otra estatua más y otro Perro guardián. Tras derrotarlo, abre el cofre del fondo para conseguir las Cenizas de monje ígneo.
Ve de vuelta al elevador y sube en él (solo una vez). Pronto te encontrarás con el portón doble entre las dos estatuas y que por ahora esté cerrado, así que baja por las escaleras de la izquierda. Algunos diablillos más y al fondo un elevador con cadenas en el que te tienes que montar para bajar en él.
En la siguiente sala te espera un tarro grande por la derecha, así que acaba con él y sube por las escaleras de la derecha.
Ten cuidado con el interruptor trampa al inicio del pasillo y llegarás a una sala con cuchillas que suben y bajan, además de varios tarros pequeños de los que explotan. Tras esta sala, en la siguiente yendo recto no habrá nada, así que sube por las escaleras de la izquierda.
Ábrete paso entre los pulpos y en la siguiente sala con un par de tarros pequeños (inertes) y un interruptor trampa en el suelo, por la parte izquierda hay un cadáver con Bolos estimulantes x1 y en la sala del fondo te espera un tarro grande (éste muy vivo).
Ahora tienes que dejarte caer por el agujero junto al cadáver de los bolos, donde indica la cutreflecha en la imagen del párrafo anterior. Aquí encontrarás un cadáver en el bordillo con Mariposa naciente x1.
Déjate caer a la parte de abajo y, estando de espaldas a la estatua, ve por el pasillo del Norte y móntate en el elevador para subir en él. Aparte de los diablillos, tú sube las siguientes escaleras y te encontrarás con otro Perro guardián (enemigo normal) y un cadáver con Resina de raíz x5.
Da media vuelta, volviendo a bajar por el elevador, y hazlo subir pero ahora tú mantente en tierra firme para luego dejarte caer por el agujero. Nada más bajar te espera ahí mismo un tarro de los grandes. Hay varios agujeros en las esquinas y si te caes no te vas a morir ni recibir daño pero... tendrás que dar toda la vuelta para volver aquí, así que ten cuidado con eso y/o retrocede hasta el pasillo.
En cualquier caso, en la siguiente sala, aparte de un par de tarros de los pequeños, encontrarás un cadáver con Runa dorada [10] x1 y la palanca de la que tienes que tirar para abrir el portón doble.
Ahora déjate caer por el bordillo, ve por el pasillo del Norte, sube por el elevador y las escaleras, y a la izquierda estará el portón ya abierto, así que pasa por él y luego por la niebla escaleras abajo para enfrentarte al jefazo Espíritu del árbol ulcerado.
Cuando logres derrotarlo, antes de nada abre el cofre del fondo para conseguir una Raíz mortuoria. Entonces ya podrás salir de allí mediante la “llama”.