Guía Vampyr
Coleccionables
La violencia de los vulkods
Jamás dejéis que el tamaño de un vulkod os engañe. Esos gigantescos malnacidos pueden ser tan rápidos como cualquier chupasangre, y pueden ser derrotados del mismo modo: ¡atravesando y sujetando su podrido cadáver contra el suelo antes de decapitarlos! Recordad: todo se basa en la preparación y en saber aprovechar las debilidades del oponente. El problema, cómo no, es que los vulkods no tienen debilidades, son fuertes, rápidos, prudentes y letales. Son máquinas de matar con un solo objetivo: rodear vuestros cuellos con sus gigantescas garras.
Así pues, si alguno de vosotros sufre la desgracia de enfrentarse a un vulkod, tan solo recordad lo siguiente: ¡Esquivar y hacer que se enfade! Heridlo, aturdidlo, conseguir que pierda los estribos. El cerebro del vulkod pierde el control al irritarse en exceso, deja de pensar y comienza a atacar ciegamente. Esa será vuestra única oportunidad de vencer, obteniendo la ventaja táctica contra una bestia atontada. ¡Aprovechadlo!
De “Conoce a tu enemigo”, de Carl Eldritch, líder de Priwen
-Categoría: Especies de vampiros
Se consigue como recompensa por derrotar al jefazo Leon Augustin en las alcantarillas durante la misión Selección antinatural en el Capítulo 5.