Guía Dragon Quest XI: Ecos de un Pasado Perdido

Mazmorras y Alcantarillas de Heliodor

 

 

Tu reunión con el rey de Heliodor en el Castillo no ha salido muy bien que digamos, y acabarás encerrado en una celda de las mazmorras de Heliodor, pero míralo por el lado bueno, al menos recibirás el trofeo ¡A la aventura!.

 

Mazmorras de Heliodor Mazmorras de Heliodor

 

Intenta abrir la puerta de tu celda y verás una escena con el “compañero” de la de al lado, el cual se librará cuando venga un guardia y, cómo no, también abrirá tu puerta, pero sólo por que eres el Luminario... Tras la escena, entra en la celda de ese misterioso encapuchado para ver otra más en la que recuperas todas tus cosas (tranquilo/a, no falta nada). Por aquí no hay nada más que hacer, así que vuelve a la celda y habla con el encapuchado para luego meterte por el agujero que lleva a las Alcantarillas.

 

guardas de Heliodor

 

Nada más llegar, lo primero que te llamará la atención es que no hay mapa ni minimapa, pero tampoco pasa nada, el camino es bastante lineal (y por las puertas ni te molestes por que están todas cerradas). Al poco rato verás una escena en la que aparecen unos guardias de los que tienes que huir... aunque considera el pararte a luchar contra ellos si quieres para conseguir algo de EXP extra (aunque los derrotes seguirán yendo a por ti indefinidamente), por ahora el desconocido actuará el sólo automáticamente.

 

Alcantarillas de Heliodor puente derrumbándose

 

Aparte de los que te persiguen inicialmente, también habrá otros a los que puedes no huir de ellos, sino esquivarlos haciendo exactamente lo mismo que hace tu compañero. De nuevo tú decides si esquivarlos o bien luchar directamente contra ellos. Al poco rato, cuando cruces un puente y os rodeen los guardias, el puente se derrumbará bajo vuestros pies, pero al menos os habréis librado de ellos.

 

estatua

 

Estaréis en una zona desconocida y justo delante tienes una estatua, así que asegúrate de guardar la partida antes de seguir avanzando.

 

huída del dragón huída del dragón

 

Cuando llegues al fondo de la cueva, prepárate, por que aparecerá un enorme dragón y aquí lo de quedarse a luchar ya no es una opción como antes, aunque tampoco te preocupes, por que no tienes más que correr sin parar hacia la cámara durante toda esta guardia del dragón y ya está, no tiene ninguna dificultad. En cierto momento aparecerán enemigos menores, pero tú como si no estuvieran... tan solo sigue corriendo.

 

huída con Erik

 

El caso es que tras una serie de escenas, lograréis escapar dando un salto al vacío, no sin antes de que el encapuchado revele su identidad, presentándose como Erik. Tras esto, te darán la opción de guardar la partida, así que hazlo y entonces continuemos en Colinas de Heliodor.